EL PROYECTO DE CONSERVACIÓN DE LOS NAVAJOS
DE EL CASAR ECHA A ANDAR
Desde hace meses la asociación La Campiña Verde trabaja en colaboración
con el Ayuntamiento de El Casar en un proyecto de recuperación y conservación
de las lagunas temporales del término municipal.
La Laguna del Campo de Cubillo y Navajo
Anadino febrero 2021
¿Por qué este proyecto?
Las lagunas temporales o navajos son figuras muy relevantes
del paisaje de El Casar. Constituyen pequeños hábitats muy ricos en biodiversidad,
son refugios de aves y fauna y están directamente conectados con una de las
actividades económicas tradicionales, la ganadería extensiva. Protegiendo nuestras
lagunas temporales protegemos y conservamos nuestro patrimonio natural. Preservar
los hábitats naturales como los bosques, cursos fluviales o los humedales es
fundamental de cara a prevenir o disminuir los efectos del cambio climático.
¿Qué son las lagunas temporales o navajos?
Las lagunas temporales son hábitats acuáticos que sufren recurrentemente
fases de desecación. La gran diferencia de estos medios, comparados con los de
aguas permanentes, es que albergan especies singulares que, siendo acuáticas,
son capaces de resistir los periodos secos; o bien que sus ciclos de vida
incluyen una fase acuática y otra terrestre, como ocurre por ejemplo con los
anfibios o las libélulas.
Las lagunas temporales son
muy variables, pueden ocupar amplias o reducidas superficies, pero, en general,
no suelen ser profundas. Durante muchos años han sido “invisibles” y menospreciadas
como hábitats de especies acuáticas, y se ha tendido a transformarlas o
desecarlas, afectando con ello a las interesantes especies que albergan. En
ellas no suelen encontrarse los grandes depredadores de los medios acuáticos
permanentes, los peces, por lo que las especies que las utilizan para reproducirse se benefician
de la menor presión de depredación para su prole, convirtiéndose en los
principales hábitats de reproducción de la mayoría de los anfibios ibéricos.
Navajo Tocino en primavera y en en invierno en un año lluvioso
Los navajos son muy ricos en flora acuática, micro crustáceos,
anfibios e insectos creándose un ecosistema único basado en la adaptación de la
flora y la fauna a los periodos lluviosos y periodos de sequía. Los micro crustáceos
ponen sus huevos que quedan enterrados en las lagunas cuando éstas se secan.
Los huevos pueden resistir mucho tiempo las condiciones de sequía hasta que la
lluvia y la humedad les hacen eclosionar de nuevo. Todo un sistema de
adaptación único que da valor a un ecosistema muy rico pero frágil. Los pastizales que de forma
natural se forman en las lagunas son zonas de refugio para todo tipo de aves principalmente
para las aves acuáticas y esteparias.
Cigüeñuela
común y Ánade azulón
Focha común y Garcilla bueyera
entre las ovejas en los pastizales de la laguna
¿Cuántos navajos hay en El Casar y cuál es su estado de
conservación?
En el término municipal de El Casar se han llegado a
identificar 11 navajos. La identificación se ha realizado con estudios de imagen
satélite y mapas de relieve sombreado. Los
mapas de relieve sombreado se han realizado a partir del Modelo Digital de
Superficies disponible en el Instituto Geográfico Nacional de España. Dentro de
estos 11 navajos se encuentran los que están ubicados en terrenos privados y públicos.
Todos los navajos situados en terrenos privados están prácticamente desecados,
ya que los terrenos se usan para la agricultura de secano. Para evitar la
concentración de agua en el terreno se han utilizado históricamente drenajes y
aportes de tierra para cegar las lagunas.
Hay cinco lagunas temporales o navajos ubicadas en terreno
público, La Laguna del Campo de Cubillo, El Navajo Tocino, Navajo El Palomo,
Navajo El Vedado y el Navajo Anadino. Estas lagunas constituyen el objetivo principal
de nuestro proyecto de conservación de los humedales de El Casar. Cada laguna
presenta diferentes características y grado de conservación por lo que el
primer paso en el proyecto ha sido realizar un primer estudio en cada laguna de
su fauna y flora, y los problemas de conservación que presentan (malecones
artificiales, drenajes, proximidad a los cultivos, posible contaminación del
agua por hidrocarburos o fitosanitarios).
La conservación de las lagunas es incompatible con el uso de
los terrenos que ocupa la laguna para actividades agrícolas por lo que el
segundo paso ha sido asegurar que las parcelas municipales donde se ubican los navajos
dejen de estar arrendadas para usos agrícolas, respetándose la extensión natural
de estos pequeños humedales. En el Pleno
municipal del día 11 de mayo, se aprobó iniciar la recuperación de estos 5
humedales no renovando los contratos de los agricultores que las arrendaban. Una
vez que estos terrenos dejen de ser roturados podrán poco a poco volver a sus condiciones
naturales, desarrollar zonas de pastizal e inundarse estacionalmente.
Otro paso fundamental es la protección de estas lagunas, incluyéndolas
en el Plan de Obras Municipal de El Casar (POM) como espacios protegidos.
El proyecto ha comenzado a andar; habrá que evaluar qué medidas
se deben tomar para mejorar y conservar cada laguna atendiendo a sus características
y grado actual de conservación. Contamos con el asesoramiento de expertos en
restauración de humedales, de asociaciones ecologistas y también con nuestra
ambición y la del Ayuntamiento de El Casar de recuperar estas lagunas y protegerlas
como una microreserva de CLM.