jueves, 21 de julio de 2022

¿CAMBIO CLIMÁTICO O YA CRISIS CLIMÁTICA?

Cambio climático: destrucción de hábitats naturales y temperaturas extremas, ¿qué soluciones hay para frenarlo?

01. Cambio climático: destrucción de hábitats naturales y temperaturas extremas - Introducción


El clima es el conjunto de condiciones atmosféricas que suceden en un lugar durante un tiempo prolongado. En los últimos siglos, el clima de toda la Tierra ha cambiado, alterando las condiciones climatológicas de un lugar en cuanto a sus precipitaciones o temperaturas.

De esta forma, cada vez es más común la escasez de agua, la desertificación, la desaparición de lagos o incluso la subida del nivel del mar. Además, han aumentado los desastres naturales como las sequías, las inundaciones o las grandes tormentas.

Todos estos hechos son consecuencia del calentamiento global, es decir, del aumento de la temperatura que experimenta el planeta debido en gran parte a la acción de los seres humanos.

02. ¿Por qué ha aumentado la temperatura del planeta?

La Tierra está rodeada por la atmosfera, una fina capa gaseosa que permite que penetre parte de la radiación solar. Para ello, esta capa contiene gases denominados gases de efecto invernadero, cuya misión es absorber parte de esa energía recibida y mantener la temperatura del planeta.

Uno de los principales gases de efecto invernadero es el dióxido de carbono (CO2). Con la revolución industrial, las emisiones de CO2 empezaron a crecer debido a la utilización de combustibles fósiles como el carbón o el petróleo.

A lo largo de los últimos siglos, la presencia en la atmosfera de gases como el dióxido de carbono (CO2) han aumentado de manera considerable y, por tanto, su capacidad para retener la radiación solar se ha incrementado, aumentando de esta forma la temperatura media del planeta.


El cambio climático afecta a todos los países y continentes del mundo, produciendo un impacto negativo en su economía, la vida de las personas y de todos los seres vivos que habitan en nuestro planeta.

En los últimos 150 años, la temperatura media mundial ha aumentado casi 1 ºC. Si la temperatura del planeta sigue aumentando, es probable que miles de especies animales y plantas se extingan para siempre.

Los océanos se han calentado, la cantidad de hielo ha disminuido y ha subido el nivel del mar. Entre 1901 y 2010 el nivel medio del mar aumentó 19 centímetros. Este hecho podría provocar que algunos lugares desaparezcan, quedando cubiertos por el mar.

El aumento de los gases de efecto invernadero ha provocado un derretimiento acelerado de los polos y glaciares del planeta. Asimismo, el agua de los océanos tiende a dilatarse y a ocupar más espacio.

Según National Geographic, en los últimos 20 años el nivel del mar ha aumentado al doble de la velocidad media con respecto a los 80 años anteriores. Esto se traduce en un aumento de entre 10 y 20 centímetros del nivel medio del mar, lo que supone el deterioro de los ecosistemas costeros, además de grandes migraciones humanas e importantes pérdidas económicas si no le ponemos solución al cambio climático.

En un futuro se prevén consecuencias peores si no tomamos medidas urgentemente. En la actualidad, tenemos a nuestro alcance algunas soluciones viables.

03. Soluciones para luchar contra el cambio climático I

Según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), tenemos todas las herramientas que necesitamos para reducir al menos a la mitad las emisiones globales para el año 2030.

Por desgracia, no podemos evitar el cambio climático, puesto que algunas de sus consecuencias ya han llegado. Sin embargo, aún estamos a tiempo de contribuir para que el cambio climático sea menos intenso y que tenga menos consecuencias negativas para todos los seres vivos que habitan en nuestro planeta.

Las soluciones recomendadas para luchar contra el cambio climático son las siguientes:

  • Energías renovables: Es necesario recurrir a las energías renovables para reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2). La energía solar y eólica, a través de diferentes medios de electrificación, pueden reemplazar ahora los combustibles fósiles en el transporte, industria, edificios, etc. Si los gobiernos presionan por eliminar los combustibles fósiles, podremos tener mejores alimentos, movilidad, viviendas y productos para más gente con menos energía y recursos.

  • Reducir el uso de plástico: La fabricación del plástico implica grandes emisiones de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera.
  • No tener coche: Si no te resulta imprescindible tener coche para tu vida diaria, es mejor optar por no tenerlo. No olvidemos que el proceso de fabricación de coches también requiere de energía y de materias primas que muchas veces no son recicladas una vez nos deshacemos de ellas.
  • Utiliza un coche hibrido o eléctrico: Podemos sustituir nuestro coche con motor de combustión por uno híbrido o eléctrico, asegurándonos de que la energía de la que se va a abastecer tiene un origen renovable.
  • Utiliza el transporte público o comparte el privado: Esto evitará el uso masivo de coches y reducirá las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera, provocados por los motores de combustión.
04. Soluciones para luchar contra el cambio climático II
  • Intenta no viajar en avión: Viajar de un punto de la Tierra a otro a una velocidad muy alta tiene un coste energético muy elevado. Si se reduce el número de vuelos que se hacen al año y optamos por viajar en tren o autobús, se evitará quemar muchas toneladas de queroseno de origen fósil.
  • Teletrabajo: De esta forma, se evita tener que hacer uso de cualquier medio de transporte. Además, también se evitaría el uso excesivo de edificios destinados al trabajo, y por tanto se evitarían costes asociados a la construcción y mantenimiento.
  • Dieta saludable: Para la producción de comidas se ocupan menos en los que se podría estar almacenando dióxido de carbono (CO2) en forma de bosques. Además, los animales se alimentan en gran medida de piensos, que necesita de grandes extensiones de tierra y de agua para que se puedan producir. Por esta razón, es recomendable comer de manera saludable, reduciendo las cantidades ingentes de carne que consumimos.
  • Dieta vegetariana: En términos de emisiones de dióxido de carbono (CO2), es mucho más costoso producir la misma cantidad de calorías de carne que de vegetales.
  • Consumir productos locales y de temporada: Los productos de temporada no requieren el uso de calefactores ni de refrigeradores para su producción. Asimismo, si consumimos productos locales evitaremos que se gaste energía en su transporte.
  • No desperdiciar alimentos: No desperdiciar los alimentos que consumimos es tan importante o más que llevar una dieta saludable. Hemos de comprar únicamente los alimentos que vamos a necesitar.
  • Producir nuestra propia comida: Si tienes espacio para poder cultivar tus propios vegetales y árboles frutales, estarás contribuyendo a emitir menos dióxido de carbono (CO2), puesto que se elimina la energía que se puede llegar a gastar en toda la cadena alimenticia.

  • Apagar las luces de nuestras viviendas: Si ahorramos electricidad reducimos también el gasto energético para producirla.
  • Reforzar el aislamiento de nuestras viviendas: Es muy importante aislar correctamente las puertas y ventanas para evitar que el frío o el calor del exterior entre en nuestras viviendas. También podemos ventilar para refrescar nuestras viviendas y utilizar más ropa para entrar en calor. Es imprescindible evitar, en la medida de lo posible, un uso excesivo de la calefacción y del aire acondicionado.
05. Soluciones para luchar contra el cambio climático III
  • Utiliza electrodomésticos eficientes: También se puede ahorrar energía utilizando al máximo su capacidad, sobre todo en la lavadora o en el lavavajillas. Uno de los lugares donde más energía se gasta en una vivienda es la cocina, donde se recomienda no tener gas, sino placa de inducción o eléctrica.
  • Calienta tu vivienda con energías renovables: No utilices gas natural para calentar tu vivienda, utiliza mejor electricidad que provenga de energías renovables.
  • Genera tu propia energía renovable: Otra muy buena opción que podemos aplicar en nuestras viviendas es instalar placas solares, aunque la eficiencia de estas dependerá de la orientación de la casa y del lugar donde vivamos.
  • Recicla, reduce y reutilizaRecicla, reduce y reutiliza: Esto ayudará al medio ambiente en un sinfín de aspectos, sobre todo reducir los desechos que tiramos y reutilizar los materiales que ya usamos, puesto que reciclar conlleva a la emisión de dióxido de carbono (CO2) para el transporte y procesamiento de materiales.
  • Participar en la reforestación: Se trata de reponer esos espacios en donde había árboles y que han sido eliminados. Es una buena forma de disminuir el cambio climático, puesto que son depósitos de carbono en nuestro planeta.
  • Informar y educar a los demás: Compartir todos estos consejos con tu círculo más cercano puede ayudar a marcar un cambio de rumbo. No obstante, no es necesario que todos tomemos todas y cada una de las medidas, se trata de elegir las que mejor se adapten a cada uno, así poco a poco estaremos influyendo a empresas y gobiernos para que tomen todas las medidas necesarias.
  • Seamos claros, esto no se trata de elecciones de comportamiento individuales, sino más bien sobre el cambio de sistemas e incentivos para prestar servicios justos, equitativos y sostenibles para nuestro planeta.

Fuente: Ambientum, EFE VERDE

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